miércoles, 11 de abril de 2012

El desplome del PAN y Josefina


En sólo un par de días, el tracking diario de GEA-ISSA/Milenio ha arrojado datos categóricos que dan cuenta del avance de Enrique Peña Nieto y el desplome de la candidata panista Josefina Vázquez Mota. De 52 puntos contra 26 respectivamente el lunes por la noche (donde EPN sacaba ya una ventaja de 2 a 1), al del martes por la noche, donde EPN ostenta 53.2% de la intención de voto efectiva, por 23.9% de JVM y 21.9% de AMLO. Lo verdaderamente sorprendente, es que Peña Nieto ya le saca ¡¡¡30!!! puntos de ventaja al segundo lugar, y que Josefina sólo aventaja por dos puntos a López Obrador.


De continuar las tendencias prevalecientes, el "efecto Peña Nieto" será verdaderamente devastador en todas las campañas: diputados federales, senadores y las de gobernador, alcaldes y diputados locales en los estados. Será semejante al "efecto Cárdenas" en 1997 o al "efecto Fox" en el 2000.

Ahora bien ¿a qué se debe este nuevo escenario?, Primero a una muy buena campaña de Peña Nieto, con planeación y cuidado extremo en diseños, frases, compromisos, etc. y una verdaderamente desastrosa campaña panista que ha venido concatenando error tras error desde que iniciaron oficialmente las campañas. El ya muy mencionado evento de toma de protesta ante estadio vacío fue sólo el comienzo.  Siguieron los desvanecimientos, los errores en el discurso, los pésimos spots de televisión y el pésimo diseño en los espectaculares.  Para cerrar nos encontramos el lunes pasado con una foto donde aparecen prácticamente todas las corrientes del PAN en un esfuerzo por demostrar unidad, que lo único que hizo fue mostrar una gran desesperación y un vano intento por posicionar a Josefina como "La Jefa".

Los números no mienten. Las tendencias marcan a un Enrique Peña Nieto en ascenso; un desplome de Josefina Vázquez Mota y un muy ligero repunte de Andrés Manuel López Obrador (quien había venido fluctuando alrededor de los 20 puntos porcentuales). Peña Nieto se dirige cómodamente a su mejor escenario: una ventaja de 25-30 puntos sobre el segundo lugar y un virtual empate entre el segundo y el tercero. Quien sea que quede en segundo lugar da lo mismo: el PRI quedaría con alrededor de 55-60 puntos porcentuales, contra 20-25 tanto para el PAN como el PRD (donde estos se disputan entre 40 y 45 puntos porcentuales). No sobra subrayar que de quedar 55-25 el primero y segundo lugares (es decir una ventaja final de 30 puntos) sería una ventaja de ¡¡¡14 millones de votos!!!  si se confirma una participación del 60% del padrón electoral.

Además de arrasar en la elección presidencial, estos números acarrearían consigo un resultado inusitado en las demás elecciones favorable al PRI. Ya nadie tendrá que preocuparse por la mayoría en el Congreso, y el PRI obtendría triunfos importantes en estados como Jalisco (actualmente gobernado por el PAN). Las alcaldías y diputaciones locales serán mayoritariamente priístas y sólo quedaría el Distrito Federal como "bastión" del PRD y probablemente Guanajuato como "bastión" panista.

La incógnita en esta elección deja de ser quién ganará la presidencia de la República, La incógnita real es quién quedará en segundo lugar. De continuar las tendencias y si el "golpe de timón" panista no da resultados muy pronto, se perfila ya la posibilidad de que Andrés Manuel López Obrador gane el segundo puesto.  Habrá que ver qué distancia le logra sacar a Josefina, pues de ser significativa, podría hacer que se desfondara el PAN como ocurrió en 2006 con el candidato priísta  Roberto Madrazo Pintado.

No pretendemos aquí aseverar que los números de GEA-ISSA/Milenio sean necesariamente la realidad del proceso, pero si la decisión de publicar resultados diarios les ha dado una ventaja por sobre todas las demás casas encuestadoras, incluyendo Mitofsky que innovó publicando cada quince días en lugar de sus acostumbrados reportes mensuales.  Si el promedio de las encuestas a finales de marzo era  50-30-20, a mediados de abril la tendencia será 53-23-23-1.

Lo interesante en este proceso es que la mayoría de las casas encuestadoras coinciden en sus números con diferencias mínimas. Sólo resta esperar el primer debate del 6 de mayo para ver si hay modificaciones significativas a las tendencias señaladas. Si las hay, seguramente serán entre el segundo y tercer lugar.







Fuente : Diario Milenio online.