La "Caravana del Consuelo": ¿Ultima Oportunidad?

El pasado domingo 8 de mayo llegaba al Zócalo de la Ciudad de México, la "Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad" que encabezaba Javier Sicilia proveniente de Cuernavaca. Impulsado por la absurda muerte de su hijo -al parecer a manos de sicarios del narco -Sicilia iniciaba una protesta ("Estamos hasta la Madre") contra el "pudrimiento" de las instituciones nacionales;  contra la "guerra contra el narco" liderada por el Presidente de la República; contra las instituciones encargadas de procurar la justicia en todo el país: en suma, contra la indiferencia, contra la corrupción oficial, contra el olvido de las miles de familias vulneradas por las absurdas deficiencias del sistema de seguridad pública y procuración de justicia a lo largo y ancho del país. 

Si bien tuvo un "error" muy criticado (iniciar su mensaje pidiendo la renuncia del Secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna), Sicilia convocó desde ese domingo, a la firma de un " Pacto por la Paz con Justicia y Dignidad" a ser firmado en Ciudad Juárez (sin duda la ciudad más vulnerada por la delincuencia organizada y la "guerra" orquestada desde la Ciudad de México) el día 10 de junio. 

La Caravana pasó por 10 ciudades (algunas de ellas verdaderos paradigmas del "estado fallido" como Morelia, Durango y Chihuahua) y recorrió 3,400 kilómetros, con 13 autobuses y 25 automóviles.  El día de ayer sábado llegó por fin a Ciudad Juárez. Los esperaban  familiares de la masacre de Creel en 2008, madres de las jovencitas víctimas de los Feminicidios (Ciudad Juárez siendo la "capital" nacional de este fenómeno), familiares de los jóvenes asesinados en Villas de Salvarcar,  compañeros de Marisela Elizondo que fuera asesinada frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, por reclamar la liberación del asesino de su hija. No en balde la firma del Pacto se había convocado en Chihuahua.   

Recibió a Javier Sicilia, la Sra. Luz María Dávila, madre de los dos hermanos que murieron en la balacera de Villas de Salvarcar y, quien increpara a Felipe Calderón cuando se presentó en Cd Juárez después de la masacre. Como en todas las escalas de la Caravana, se escucharon historias terribles de asesinatos, levantones, "daños colaterales" de hombres, mujeres e incluso niños. Hicieron su aparición también los "tapados" de Monterrey exigiendo la salida del ejército y la PFP y algunos que se dijeron integrantes del EZLN (la "otra campaña") que supuestamente reclamaban a los integrantes de la marcha que intentaran negociaciones con el Gobierno.

En su estancia en Ciudad Juárez, Sicilia visitó diversos lugares emblemáticos y sentenció: "(...) que cumplan con lo que nos prometieron cuando llegaron al poder y juraron ante la Constitución" Con la firma del Pacto por la Paz," se recuperará la memoria de las víctimas de la violencia en el país: "Esa placa que pusimos en el Zócalo en memoria de Marisela Escobedo, es parte de esa memoria. Tenemos que  llenar al país con la memoria de nuestros muertos para recordarles a las autoridades que tienen que cumplir con su trabajo".

El Pacto Nacional por la Paz con Justicia y Dignidad, dado a conocer ayer alrededor de las 22:30hs después de largas deliberaciones, promueve -entre otros puntos -lo siguiente:

•   Fin a la Estrategia de Guerra

•   Regreso del Ejército a sus Cuarteles

•   Eliminación del Fuero Militar

•   No a la "Iniciativa Mérida" y  a la intromisión de EEUU en temas policiales

•   Impulsar un Foro Nacional por la Paz

•   No a la Ley de Seguridad Nacional si no es consensada con ONGs

•   Impulsar Reforma Política:  candidaturas indep., revocación de mandato, etc

•   Aumentar presupuesto a las Universidades

•   Aumentar de manera emergente los salarios

•   Acompañar a las víctimas a las Procuradurías en cada entidad

•   Exhortar al Gobierno de EEUU para parar tráfico de armas a México

•   Dar autonomía real a las Contralorías e impulsar rendición de cuentas

•   Exigir a los Medios de Comunicación que actúen con ética

La "Caravana del Consuelo" logró dar voz a cientos de familias agraviadas por los "daños colaterales"; por la indiferencia e incapacidad de las autoridades de todos los órdenes de gobierno. Su lucha tal vez más destacada: el impulsar la memoria (el no-olvido) de las víctimas de la violencia a lo largo y ancho del país.    

Tal vez esta lucha ciudadana a veces desorganizada, a veces un poco extrema, logre meter a la agenda nacional el tema de la seguridad y la real procuración de justicia. Además de ir a El Paso Texas el día de mañana, Javier Sicilia tiene ya agendadas reuniones con representantes de los tres poderes y de diferentes órdenes de gobierno.  Es de vital importancia que la lucha que él de alguna manera encabeza, se traduzca en reformas legislativas y en acciones que realmente nos ayuden a "ventilar" lo mucho de podrido que tienen las instituciones vinculadas a los temas de seguridad y procuración de justicia.  La "Caravana del Consuelo" y el "Pacto Nacional Ciudadano por la Paz" pueden ser nuestra última oportunidad. Un llamado ciudadano que "empuje" a las instituciones; a los gobiernos y a los partidos, a entender la absoluta urgencia de cambiar de raíz.  Todavía se puede.